Una hembrota hermosa, portento sin par
Y quien la posee, delira a rabiar
Su rosa es elixir, sus nalgas caviar
Su piel es de seda, brujo su mirar
Su entraña caliente, muy terso manjar
Se moja con crema, se quita su ajuar
Ella es una fiera, temible jaguar
Tenerla es la gloria, del cielo libar
Sus pies bien cortados, muy suaves están
Su alma es de Cristo, su voz de Satán
Varones jugosos, a su lecho van
Bendicen su perla, más buena que el pan
La hembra se tiende, de lado, y se da
Está relajada, bien dispuesta está
Olor delicioso, guarda en Omertà
Quien beba su néctar, gloria beberá
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