"La poesía es el vino de los demonios". (San Agustín)
jueves, 3 de enero de 2013
Máquina
Alacrán mecánico, mi cabeza detonada
Hombre, cinta metálica, botas de guerra
Peligro: este corazón muerde de noche
La música hace track, como una costilla
El móvil repicó, se encendieron sus absurdas luces
Ella lleva crema en la entrepierna, pendientes de gato
Esta fuerza demoníaca es alerta, es palabra cierta
No llames destino a este negocio, que ha sido cerrado con destreza
Como un par de lunas aceradas, son mis dos pupilas dilatadas
Vivir cada momento con locura, al final la cosa dura lo que dura
Como un aparato eléctrico es mi cuerpo, toda la energía que yo invierto
Un computador inteligente, que yo programé perfecto con la mente
Máquina monstruosa que es mi alma, puede destruirte como un arma
Hembra, ángel malandro, puñalada… y cada decisión es calculada…
Acá no hay vuelta de hoja, dulce niña, será reñida en vano toda riña
Ícaro insólito, nácar brujo, quien evitó retarme bien dedujo…
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