La humildad antecede siempre a la gloria
Ser humilde lleva siempre a la victoria
Allá va, mi corazón, el Waldorf Astoria
Desde allí te contaré mi bella historia
Quien escribe hurga siempre en la miseria
La paciencia lleva siempre hasta la histeria
Te lo cuento si me llevas al Hesperia
Que mi broma viene a ser cosa muy seria
Pantaleta, hilo negro, putería
Nuestro amor termina en una joyería
Dos anillos, como el mismo Dios quería
Par de joyas, puro charm, quién lo diría
Te conozco, cual la palma de mi mano
Soy un santo, con arrestos de villano
Yo te juro, corazón, me quedo sano
Yo te juro, y yo nunca juro en vano
