"La poesía es el vino de los demonios". (San Agustín)
viernes, 16 de diciembre de 2011
Muñeco de lujo
El anda por las sombras, oculta su dinero
Es guapo y adorable, inocuo como un viejo
El lucra en todas partes, quiere comprar el cielo
Subieron las acciones, vende que tengo miedo
Las nenas lo veneran, su miel es todo un lujo
No sale de su cueva, de mimos y riqueza
La calle lo confunde, lo asusta la franqueza
El va directo al grano, mas nunca se la juega
Es guapo y elegante, sus manos son de nena
No sabe lo que es lucha, elude toda brega
Es listo en el negocio, codicia buena venta
Quien tonto en él confía, a un cerdo tira perlas
Pero al final del día, cuando la noche llega
La triste compañía del diablo lo atormenta
Quisiera bien ser otro, saltar la talanquera
Tanto poder lo asfixia, y siempre más quisiera
Estar en sus zapatos, muchos tontos anhelan
Es todo un paradigma, de éxito y belleza
Después de todo el hombre, tan malo no es, de veras
Tiene su poca cuota, de amor y faz sincera
El sueña que algún día, alguna cosa cambie
Cree que Dios no puede, que es él quien hace o no hace
Pero de alguna forma, su libertad es cárcel
Aciago prisionero de fatuidad y carne
Su voz es seductora, es grave, electrizante
No es tanto que sea malo, sino que dar no sabe
Si alguna vez lo topas, no arriesgues tus brillantes
Concede mano zurda, que con mirar te baste
Muñeco de buen lujo, de afeites y respingos
Esquivo y suficiente, no sabe ser amigo
Ya todos lo conocen, su farsa es cuento viejo
Allá quien sí le cree, nunca faltó un pendejo
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